EN 41 VERSOS (II)

ella es dinamita
como para reventar una cuidad,
como si estallara una bomba nuclear en el puto medio y medio del mundo.
deja huella por donde pasa
como si se creyera un tornado,
o un huracán.
es guerra
una AN-94,
no, no,
un RPG-7,
y aún así es mi calma.
no sabría describirlo,
pero la chica del pupitre de al lado
pasó a ser mi salvavidas,
mi caos,
y mis domingos por la tarde.
ella es la definición más clara de mujer que he vivido en mi vida.
también es delicadeza
pero tan sutil que atrapa
y te hace querer siempre más.
ella es mis ganas
de todo lo bueno que vaya a venir,
y de reírnos
de todo lo malo que dejemos atrás.
es mi primer paso adelante
mi meñique entrelazado
mis cosas llenas de pelos,
mi fondo de pantalla,
y mis planes de futuro.
es mi apoyo y mi libertad,
mi impulso,
mi seguridad
y mi aliento cuando falta.
es mi rabia
mi miedo,
mi valentía cuando no puedo ser cobarde,
mi timidez
y mi confianza,
mi desesperación,
y mi suerte,

porque por suerte cayó en el mismo planeta que yo.

EN 41 VERSOS (I)

soy uno más de los que escribe en los márgenes
ve series para adolescentes,
lee libros de poesía
y no tiene nada claro su futuro.
ah, y saluda al entrar en los autobuses.
sonríe mucho,
y piensa que todavía le queda algo de magia,
un as en la manga
o en el bolsillo del pantalón.
escribe de madrugada
en hojas sucias de libreta,
porque eso es muy de peli americana.
deja los poemas a medias
porque tiene un conflicto en trámites con su musa.
es de los pocos que cree en Dios.
pone los pies encima de la mesa del salón.
es detallista de pequeñas cosas;
como abrazar despacito,
o guiñar un ojo.
da besos en los pies si se le presenta la ocasión,
porque lo de besar las manos está demasiado visto.
no soporta a los niños,
pero daría la vida por ellos.
es de los que pisan a propósito las líneas de las baldosas por la calle,
porque los verdaderos problemas hay que afrontarlos
pero corre por el pasillo de su casa cuando es de noche y está oscuro.
es azul por dentro
porque es frío pero también paz.
toca la guitarra sin tener ni idea de música
y es indeciso como sólo un Libra podría.
duerme boca arriba,
y sí, se le cae la baba.
quiere ser mil cosas
como cuando de pequeño te preguntan qué vas a ser de mayor.
anhela inquieto
y mantiene sus sueños en secreto para evitar gafarlos.
siempre lleva zapatillas
y calcetines blancos.
es más astuto que inteligente,
y tiene suerte,

porque por suerte cayó en el mismo planeta que tú.